Accidentes de tránsito en Cuba se disparan por semáforos apagados durante apagones
En los últimos meses, Cuba ha enfrentado una crisis energética sin precedentes que ha afectado de manera significativa la vida cotidiana de sus habitantes.
Los apagones, cada vez más frecuentes, no solo alteran las actividades domésticas, sino que también tienen graves repercusiones en la seguridad vial.
Los semáforos, esenciales para la regulación del tráfico en las ciudades, quedan fuera de servicio, creando un caos en las intersecciones y aumentando el riesgo de accidentes, algunos de los cuales han resultado ser fatales.
Quejas y denuncias en redes sociales
La población cubana ha recurrido a las redes sociales para expresar su frustración y preocupación.
Grupos de Facebook dedicados a accidentes de tránsito y publicaciones en otras plataformas digitales son testigos de una creciente sensación de inseguridad entre conductores y peatones.
La desaparición de las señales lumínicas de las calles debido a los apagones es una constante en los comentarios de los internautas.
Un ejemplo destacado es la denuncia de un usuario en el grupo «Accidentes Buses & Camiones», quien alertó sobre la falta de corriente en el cruce de las calles 100 y 51, acompañado de la ausencia de policías que regulen el tráfico.
«Súper peligroso esto señoras y señores. Conductores, ojo aquí: el cruce de 100 y 51 está sin corriente. Semáforos apagados, y lo más lindo de todo es que ni hay policía», publicó un conductor alarmado.
Accidentes frecuentes en intersecciones peligrosas
La falta de electricidad en los semáforos no es el único problema; la falta de previsión por parte de las autoridades agrava la situación.
En una publicación del mismo grupo, se mostraron dos accidentes ocurridos en la peligrosa intersección de la avenida 31 y la calle 42.
En uno de estos incidentes, un almendrón, un auto de fabricación estadounidense de los años 50, chocó con un Lada de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR).
En otro accidente en la misma esquina, una moto y una guagua colisionaron, resultando en heridas graves para el motorista.
Los conductores afectados y los testigos de estos accidentes coinciden en la necesidad de una mayor presencia policial en los puntos críticos durante los apagones.
Un usuario comentó: «Hay un montón de semáforos apagados y ningún policía. Pienso que si ellos tienen la programación de los apagones, deberían poner policías en todos los cruces peligrosos».
Demandas de los ciudadanos ante la indiferencia de las autoridades
La desesperación de los conductores es evidente en sus comentarios. «Es terrible lo de los semáforos sin luz. Bastante pocos accidentes hay», expresó un usuario, mientras otro relataba con ironía cómo un agente de tránsito se refugiaba del sol bajo un árbol mientras el semáforo permanecía apagado y los vehículos intentaban cruzar la intersección de 31 y 42 sin control.
La situación llegó a un punto crítico cuando un video compartido en redes sociales mostró un accidente en la esquina de la avenida G y la calle 17, en el Vedado habanero.
Las imágenes de una cámara de seguridad capturaron la colisión de dos vehículos que circulaban a gran velocidad, ignorando el derecho de vía, lo que resultó en heridas graves para uno de los conductores y puso en peligro a varios transeúntes.
En respuesta a esta crisis, algunos ciudadanos recuerdan las medidas tomadas anteriormente por las autoridades.
A principios de abril, el coronel Roberto Rodríguez Fernández, jefe del departamento Especializado de Tránsito de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR), informó que unidades motorizadas se habían desplegado en puntos críticos de la ciudad para mejorar la fluidez y seguridad del tráfico tras el cierre del Túnel de la Bahía por labores de mantenimiento.
Los conductores cubanos exigen una respuesta similar ante los apagones que dejan a los semáforos sin luz.
La demanda es clara: se necesita una previsión adecuada y la asignación de agentes especializados para reforzar la seguridad del tráfico durante los apagones, evitando así accidentes y protegiendo la vida de conductores y peatones por igual.
