¿Es legal llevar regalos a Cuba? La Aduana lo aclara en una rueda de prensa
La Aduana General de la República de Cuba ha emitido una aclaración de interés para los viajeros que arriban al país.
En una reciente rueda de prensa, se confirmó que no existe prohibición alguna para que los pasajeros importen regalos o encomiendas destinados a familiares o amigos, siempre y cuando cumplan con las normativas vigentes en la isla.
Esta declaración ha generado cierto alivio y esclarecimiento tras la circulación de rumores sobre posibles restricciones y sanciones relacionadas con el transporte de regalos por parte de los viajeros.
No hay prohibiciones, pero sí regulaciones
Jorge Luis Bubaire Quintana, jefe de la Aduana en el Aeropuerto Internacional José Martí de La Habana, fue el encargado de transmitir esta información durante un encuentro con los medios.
Bubaire aclaró que “nunca se interferirá con el deseo de los pasajeros de importar regalos destinados al consumo personal o de familiares y amigos”, siempre y cuando este proceso se realice dentro del marco de la legalidad.
En este sentido, destacó la importancia de que los viajeros se apeguen estrictamente a las normas establecidas para evitar complicaciones legales.
A pesar de que se permite el transporte de obsequios, la Aduana cubana mantiene estrictos controles sobre los productos que ingresan al país, con el fin de garantizar que no se vulneren las disposiciones vigentes en materia de importación.
Contexto de la aclaración: rumores de prohibiciones
Esta aclaración por parte de las autoridades aduaneras parece ser una respuesta directa a la viralización de noticias que sugerían una nueva prohibición sobre el transporte de encomiendas destinadas a terceros.
Los rumores indicaban que las personas que ingresaran al país con regalos o paquetes para terceros podrían enfrentarse a sanciones administrativas o incluso penales.
Sin embargo, la Aduana ha desmentido categóricamente estas informaciones, reiterando que su labor no será un obstáculo para el tránsito de viajeros ni para las operaciones de comercio exterior.
Regulación a las «mulas» y encomiendas para terceros
A pesar de la claridad en torno al transporte de regalos para familiares y amigos, existe una postura firme del gobierno cubano respecto a las llamadas «mulas».
Estas personas, que de manera frecuente viajan a la isla para transportar mercancías en nombre de terceros, han sido advertidas reiteradamente sobre las consecuencias legales de su actividad.
En marzo de 2018, la Aduana cubana emitió un comunicado específico para este tipo de viajeros, señalando que cualquier pasajero que actúe como portador de encomiendas ajenas asume la plena responsabilidad administrativa y penal derivada del contenido de dichos envíos.
Este tipo de advertencias se enmarca en los esfuerzos del régimen cubano por controlar el flujo de bienes que entran al país, particularmente aquellos que se destinan al comercio informal.
Alivio temporal en las medidas arancelarias
Un factor relevante que ha impactado en el flujo de mercancías a Cuba es la exención temporal del pago de aranceles para ciertos productos.
En lo que va de año, el 87% de los pasajeros que han utilizado el canal verde de la Aduana han ingresado al país con mercancías como alimentos, productos de higiene, medicamentos e insumos médicos, los cuales están eximidos del pago de impuestos.
Esta medida, que ha sido vista como una ayuda para la población cubana en medio de la crisis económica, ha resultado en un aumento considerable de la importación de estos bienes.
No obstante, esta política arancelaria favorable podría llegar a su fin en breve.
En julio de 2024, el primer ministro cubano, Manuel Marrero, expresó preocupación por el uso indebido de estas exenciones.
Marrero criticó a las personas que se dedican a importar grandes volúmenes de productos exentos de impuestos para venderlos en el mercado negro a precios “excesivos y abusivos”.
Según el dirigente, estas «distorsiones» van en contra del objetivo original de la medida, que era proporcionar un alivio económico a la población, y anunció que la prórroga de la exención arancelaria se mantendría solo hasta septiembre.
Un panorama incierto para los viajeros
Con las declaraciones de Marrero, el futuro de las exenciones arancelarias sigue siendo incierto.
Si bien los viajeros han aprovechado esta medida para traer productos esenciales sin pagar impuestos, el gobierno cubano parece estar evaluando la posibilidad de revertir esta política debido a los “abusos” observados en su implementación.
La Aduana cubana, por su parte, continúa asegurando que sus regulaciones se enfocan en garantizar el cumplimiento de las leyes, sin interferir con los viajeros que cumplen con las normativas.
El transporte de regalos por parte de los viajeros que entran a Cuba sigue siendo una práctica permitida y regulada.
Sin embargo, las autoridades cubanas mantienen un control estricto sobre las mercancías que ingresan al país, especialmente aquellas destinadas al comercio informal, con el fin de “evitar distorsiones” en el mercado interno.
Asimismo, la incertidumbre en torno a las medidas arancelarias hace que los próximos meses sean clave para determinar si continuarán las exenciones que han beneficiado a muchos viajeros y sus familias.
