Cuba en 2022 experimentó apagones sin precedentes
Durante los primeros días de octubre, se produjeron movilizaciones espontáneas de la población por las calles de La Habana y otras provincias cubanas, como consecuencia de la escasez de electricidad.
Esta situación afecta al país desde 2021, y fueron, junto a las restricciones derivadas de la pandemia y la crisis económica, el motivo por el cual se dieron las históricas manifestaciones el 11 de julio de ese año.
Vicente de la O Levy, ministro de Energía y Minas, anunció el lunes, 12 de diciembre, que en 2022 la disponibilidad de electricidad bajó a niveles sin antecedentes, siendo el apagón total, posterior al paso del huracán Ian, el momento más crítico de todos.
En octubre, la producción eléctrica alcanzó solamente el 37,9% de la capacidad total instalada en Cuba.
Durante la primera quincena de octubre, el nivel de afectación fue de 10 horas y 23 minutos de apagón promedio por día.
Para priorizar las zonas residenciales, las autoridades tuvieron que reducir el abastecimiento energético a los demás sectores, como comercios, servicios y otras actividades clave, según explicó el ministro.
Esto llevó a que en noviembre el promedio de horas de apagón disminuyera a 6 horas y 37 minutos y ahora (mediados de diciembre) se ubique en 2 horas y 23 minutos.
Vicente de la O Levy manifestó que el país necesita unos 250 millones de dólares para el desarrollo y mantenimiento del sistema eléctrico, el cual se compone de ocho grandes centrales de generación térmica, grupos electrógenos, siete plantas flotantes alquiladas a Turquía y, en menor medida, unidades de producción de energía solar y eólica.
El Ministro destacó cómo la situación eléctrica ha empeorado desde 2021, principalmente debido a las sanciones de EE.UU., lo cual dificulta el acceso a los mercados internacionales y aumenta el costo de la importación de combustibles.
Como ejemplo, mencionó que a finales de 2022 el gasto destinado a importar combustibles a Cuba llegará a 1.700 millones de dólares, una cantidad casi nueve veces mayor que la de 2018.
Además, destacó que otros tres factores contribuyen a la situación energética actual: los incendios de dos centrales termoeléctricas, el de la base de supertanqueros y el huracán Ian, a finales de septiembre.
