Aplazan aumento del precio del combustible por supuesto ataque informático

La viceministra de Economía y Planificación de Cuba, Mildrey Granadillo, anunció en el Noticiero del Mediodía que la tan pelémica «actualización de precios del combustible», que estaba programada para comenzar el 1 de febrero, se ha pospuesto debido a un incidente de ciberseguridad en los sistemas informáticos de comercialización del CIMEX.

Granadillo explicó que el incidente de ciberseguridad fue provocado por un virus que llegó desde el exterior. Aunque se está llevando a cabo una investigación para identificar la fuente exacta del virus, este incidente ha generado preocupación en el gobierno cubano.

El aplazamiento de la actualización de precios es una medida preventiva para garantizar la seguridad de los sistemas de comercialización.

Las proyecciones del gobierno

Granadillo también reafirmó el compromiso del gobierno cubano de implementar proyecciones económicas para el año 2024, pero con una condición clave: que se creen las condiciones adecuadas para ello.

Sin embargo, ha quedado al descubierto el riesgo en la seguridad y la estabilidad de sus sistemas económicos.

El gobierno de Cuba ha dejado claro que anunciará la implementación de la actualización proyectada de los precios de los combustibles tan pronto como las condiciones sean favorables.

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Según informó en sus redes sociales el periodista Lázaro Manuel Alonso, el ataque cibernético afectó el sistema de comercialización de Cimex.

No se supo ninguna otra información sobre el ataque cibernéctico que recibieron horas antes de la «actualización» de los precios.

Razones para la actualización

La actualización de los precios de los combustibles en Cuba tiene una razón importante detrás de ella, según explicó Granadillo. Los altos precios en el mercado internacional han aumentado la presión sobre la economía cubana, y la actualización de precios es necesaria para fomentar el ahorro y gestionar la demanda.

Esto permitiría la asignación de recursos a otras actividades económicas y ayudaría a equilibrar la economía del país.

No obstante, el aumento de los carburantes en un casi un 500% ha generado varias molestas en la población que considera que estas medidas solo aumentarán el precio del transporte y la demanda de dólares en el mercado informal.

A pesar del aplazamiento de la actualización de precios, el gobierno cubano ha asegurado a la población que la logística y la venta de combustibles continuarán operando a los niveles actuales.

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Pero en varios servicentros del país la crisis con el combustible es palpable con las largas colas de autos para comprar gasolina o el aumento de los apagones en toda la isla, debido a la falta de carburante para la generación de electricidad.

Este 1 de febrero también debía comenzar la comercialización de combustible a través de las tarjetas en USD emitidas por Bandec y Fincimex para comprar la red de servicentros en moneda extranjera.

¿Reevaluación del impacto económico de la subida de precios?

La reciente decisión del gobierno cubano de posponer el significativo aumento en los precios de la gasolina y el diésel, originalmente destinado a superar el 500%, ha generado un intenso debate en redes sociales y en la calle.

La Viceprimera Ministra, Mildrey Granadillo, atribuyó la suspensión a un incidente de ciberseguridad en Cimex, la empresa encargada de la comercialización de combustibles. Sin embargo, esta explicación ha suscitado dudas entre expertos y ciudadanos.

Pedro Monreal, un conocido economista y tuitero, sugiere que la postergación podría estar relacionada con una reconsideración de las consecuencias económicas del aumento.

1/6 Hipótesis: quizás se ha hecho una segunda reflexión oficial sobre el posible “efecto mariposa” del alza del precio de los combustibles en la inflación general debido al alto peso (9%) que tienen en el total de ventas de bienes del comercio minorista formal pic.twitter.com/jTxoMGRBdJ

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— Pedro Monreal (@pmmonreal) January 31, 2024

Según Monreal, los combustibles tienen un peso considerable (9%) en las ventas totales de bienes del comercio minorista formal. Esto implica que un aumento tan drástico en su precio podría desencadenar un «efecto mariposa», exacerbando la inflación general y afectando negativamente al Producto Interno Bruto (PIB) del país.

Además, Monreal señala que los combustibles, siendo el segundo producto más relevante en las ventas minoristas según datos del primer semestre de 2023, no se han incluido hasta ahora en las «divisiones» de bienes y servicios del informe mensual de precios al consumidor de la ONEI.

La inclusión de los combustibles tras el anuncio del aumento de precios requeriría una reevaluación del impacto inflacionario de estos productos.

El reconocimiento oficial de una «inflación de diseño» malograda por supuestos poco realistas sobre el funcionamiento de los precios minoristas refuerza la hipótesis de Monreal.

Sugiere que lo que comenzó como una estrategia para aumentar los ingresos fiscales podría haber llevado a una comprensión más profunda del impacto transversal de los precios del combustible en la economía.

Finalmente, Monreal advierte sobre los riesgos de una «primera oleada» de aumento de precios liderada por los combustibles, seguida de una devaluación de la tasa de cambio oficial en un contexto de alto déficit fiscal y creciente peso del sector privado.

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Esto podría desencadenar una «segunda oleada» de aumentos de precios, exacerbando aún más la inflación y el malestar económico.

La teoría del virus como causa del aplazamiento ha sido cuestionada por algunos expertos en ciberseguridad, que argumentan que si la intención era causar daño, mantener los precios antiguos en lugar de permitir el aumento sería menos efectivo para crear malestar.

Esta perspectiva añade otra capa de complejidad a la situación, sugiriendo que la postergación podría ser menos un resultado de ciberseguridad y más una decisión económica prudente.