El desafío de Alexi Castro: hijo de Fidel cuestiona al gobierno cubano
Alexi Castro Soto del Valle, uno de los hijos del fallecido gobernante Fidel Castro, se ha erigido recientemente como una sorprendente voz “crítica” dentro del establishment cubano.
Este ingeniero en telecomunicaciones, cuyo comportamiento hasta ahora había sido de bajo perfil y alejado de la política, ha decidido alzar la voz a través de las redes sociales, emplazando públicamente al gobierno y exigiendo respuestas sobre la complicada situación económica que atraviesa el país.
Cuestionando la narrativa oficial
En una serie de mensajes publicados en la plataforma X (antigua Twitter), Castro Soto del Valle ha formulado una serie de preguntas concretas al primer ministro Manuel Marrero Cruz.
Entre ellas, ha inquirido sobre temas como la presentación ante la Asamblea Nacional de la Ley de Empresas, las modificaciones jurídicas para “perfeccionar” el funcionamiento de las micro, pequeñas y medianas empresas (MIPYMES), y el avance en la ampliación de las actividades autorizadas para los denominados “actores económicos” —una terminología eufemística que en realidad hace referencia al sector privado.
Además, el hijo de Fidel Castro ha mostrado su inquietud por conocer la fecha de puesta en marcha del Instituto de Actores Económicos, así como la anunciada información sobre los “errores cometidos” en el diseño e implementación de la reforma monetaria, conocida como Tarea Ordenamiento.
Según Castro Soto del Valle, estas son dudas que el pueblo tiene y por las que espera respuestas.
Defendiendo el legado de Fidel… a su modo
Pese a definirse a sí mismo como un “cubano patriota” que sigue el ideario de su padre, la postura de Alexi Castro Soto del Valle dista mucho de ser un simple defensor acrítico del castrismo.
De hecho, en mensajes anteriores, ha afirmado que la revolución no significa “estructuras ni métodos inamovibles”, sino un “hecho emancipador que nació con objetivos definidos”.
Esta visión, que aboga por una actualización y cambio de los postulados originales de la revolución liderada por Fidel Castro, ha generado reacciones encontradas entre los seguidores del gobierno y el castrismo.
Algunos le han recriminado que no cuestionara tanto a su padre cuando este aún estaba vivo, mientras que otros han sugerido que las verdaderas soluciones para Cuba pasan por la restauración de la Constitución de 1940 y la celebración de elecciones libres.
Un cuestionamiento inédito
La irrupción de Alexi Castro Soto del Valle como una voz crítica y exigente hacia el gobierno cubano representa un fenómeno sin precedentes dentro del entorno familiar del fallecido Fidel Castro.
Su postura, si bien aún moderada y respetuosa en el tono, supone un desafío a la narrativa oficial y una muestra de que incluso en el seno de las élites castristas pueden surgir voces disidentes que reclaman más transparencia y cambios.
Está aún por ver si este cuestionamiento del hijo de Fidel Castro tendrá algún impacto real en la dirección y las políticas del gobierno, o si simplemente será silenciado y marginado como otros intentos de apertura y debate dentro de la isla.
Lo que está claro es que la irrupción de Alexi Castro Soto del Valle en el escenario público representa un hecho insólito que merece ser seguido de cerca, pues podría ser un indicio de grietas y fisuras en el hasta ahora monolítico bloque del poder en Cuba.
Cuestionando el centralismo y el control gubernamental
En mensajes anteriores, Alexi Castro Soto del Valle ya había mostrado su descontento con la gestión centralizada de algunos ministerios, como el caso del Ministerio de Agricultura.
En aquella ocasión, criticó duramente la falta de comprensión de “conceptos como el sentido de propiedad, la necesaria autonomía para invertir, asociarse, producir y comercializar” por parte de las autoridades.
Asimismo, el hijo de Fidel Castro ha señalado que “tampoco se comprende a cabalidad, en la agricultura, el rol de cada forma de propiedad y gestión, desde la estatal hasta el campesino privado, pasando por las diversas formas cooperativas”. Una clara evidencia de que Castro Soto del Valle aboga por una mayor descentralización y una mayor apertura al sector privado, en contraste con la histórica postura del castrismo.
¿Un cambio de rumbo en el seno del poder?
La irrupción de Alexi Castro Soto del Valle como una voz crítica y exigente dentro del régimen cubano representa un fenómeno insólito que podría ser interpretado de diversas maneras.
Por un lado, podría ser visto como un intento de apertura y diálogo desde las propias élites del poder, en un momento de profunda crisis económica y social en la isla.
Sin embargo, las reacciones de algunos seguidores acérrimos del castrismo, que le han recriminado no cuestionar a su padre cuando este estaba vivo, evidencian las resistencias que este tipo de posturas pueden encontrar dentro del establishment.
En cualquier caso, la irrupción de este hijo de Fidel Castro en el escenario público como una voz disidente y cuestionadora merece ser seguida de cerca, pues podría ser un indicio de que incluso en el seno del poder cubano comienzan a surgir fisuras y voces discordantes con el discurso oficial.
Un fenómeno insólito que podría presagiar cambios, o al menos debate, en torno al futuro de la revolución y del país.
